IolAMD EyeMax es una lente diseñada para su implantación en los ojos de los pacientes afectados por problemas maculares. La mácula es la parte de la retina donde se encuentras las células (llamadas conos) responsable de la visión central del campo visual. Una de las causas más frecuentes de lesión a nivel de la mácula es la Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE), cuya consecuencia suele ser la deformación o “falta” de visión central que afecta a la lectura y a la capacidad de ver las caras.
IolAMD fue la primera lente intraocular por microincisión del mundo y fue creada en el London Eye Hospital, quienes se inspiraron en el telescopio Hubble.
IolAMD EyeMax es el resultado de la evolución de esta tecnología hacia una lente que permite a los pacientes usar cualquier parte de la mácula.
La IolAMD EyeMax combina los beneficios de un telescopio creando un aumento de entre un 15% y un 20% y, lo que es más importante, amplía la capacidad del cerebro para usar cualquier parte de la mácula como si fuera la mejor parte.
La lente de extensión macular EyeMax suele colocarse en lo que se conoce como saco capsular en el momento de operar unas cataratas. El saco capsular es el recipiente natural del cristalino, que es nuestra lente natural y tiene la capacidad de hacer converger los rayos de luz enfocándolos hacia la retina, esta lente natural a medida que envejecemos se va opacificando y se forma una catarata que disminuye nuestra visión. Tras eliminar la catarata, la mayoría de lentes utilizadas se implantan en el saco capsular a través de una minúscula incisión el ojo, por lo tanto el procedimiento de implantación de la lente EyeMax es familiar a un cirujano de cataratas. Sin embargo, la lente EyeMax es distinta al resto de lentes por dos motivos: mejorará la graduación de sus gafas permitiendo el aumento de las imágenes y al mismo tiempo, su forma única extenderá la imagen a toda la macula y no solo al centro de la misma como hacen el resto de lentes. Dado que la lente EyeMax proporciona una imagen de alta calidad a todas las partes de la mácula alivia la presión sobre el sistema visual de manera que el cerebro pueda trabajar con el ojo para seleccionar con mayor facilidad una imagen de la parte más sana de la retina. Este proceso permite leer y reconocer las caras con mayor facilidad. Si la enfermedad progresa, la tecnología de la lente EyeMax garantiza que el cerebro seleccione automáticamente la imagen de mejor calidad disponible en la retina.
La optimización de la imagen en toda la mácula es un método revolucionario para corregir las dificultades de los pacientes con enfermedades maculares, como la DMAE, el edema macular, el agujero macular, las cicatrices maculares y algún tipo de distrofia central de la macula.
La lente IolAMD EyeMax esta diseñada principalmente para aliviar la presión sobre el sistema visual y mejorar la visión lejana y la capacidad de leer. Si bien no se recuperará la visión completamente ni se detendrá la progresión de la enfermedad que ha provocado los daños en la visión central, si se minimizarán los efectos de cualquier deterioro de la retina y conservará la mejor visión que su mácula le pueda proporcionar.
La EyeMax está indicada para pacientes que han perdido la visión como consecuencia de una enfermedad macular, si bien también puede beneficiar a pacientes con visión normal, pero con un riesgo elevado de desarrollar pérdida visual, como la degeneración macular asociada a la edad. Estos pacientes pueden querer prevenir una futura pérdida de visión implantándose la lente EyeMax en momento de ser intervenidos de cataratas.
Es importante remarcar que los pacientes con lente EyeMax mono requieren el uso de unas gafas de graduación. Algunas lentes para la intervención de cataratas están diseñadas para eliminar la necesidad de usar gafas, pero no es el caso de la lente EyeMax. Los pacientes con lentes EyeMax implantadas necesitaran gafas para trabajar de cerca y para ver de lejos, y para la mayoría de ellos, el uso de las gafas graduadas implicará la implantación de una lente en ambos ojos. Si hay algún retraso entre la implantación de EyeMax en un ojo y la intervención en el otro ojo, es posible que los pacientes experimenten temporalmente la visión de imágenes de distinto tamaño en cada ojo y se corrige con la implantación en el segundo ojo.
La intervención dura aproximadamente lo mismo que una intervención habitual de cataratas, de 15 a 20 minutos.